Un dudoso informe “oficial”, del titular de la Cámara de Diputados Raúl Latorre (ANR, HC), dice que el viaje de 15 parlamentarios costó un total de G. 266 millones (ver el cuadro adjunto).
Llamativamente, el informe no menciona a los familiares y asistentes que viajaron con los legisladores para recorrer diversas ciudades de Estados Unidos durante sus elecciones presidenciales. Ninguno viajó como “observador oficial”, solo como “invitados” de dos ONG (IFES y WWE).
Este gasto generó indignación entre la ciudadanía por parte de una cámara del Congreso que ya arrastraba el escándalo de los “nepobabies”. Sin embargo, los políticos amparados por el cartismo gozan de total impunidad, a cambio de votos para aprobar leyes y presupuestos, gracias a su mayoría en ambas cámaras.
Los más afectados
Entre los sectores más indignados figuran los pacientes y sus familiares que recurren a nosocomios del sector público o del Instituto de Previsión Social (IPS). Estos contribuyentes se ven obligados a gastar sus ahorros, hacer “polladas” o hasta recurrir a comprar de contrabando en la Argentina medicamentos agotados en Paraguay. Pacientes oncológicos son los más afectados.
Los pacientes con leucemia soportaron varios meses esperando por la provisión de Asparaginasa, que cuesta G. 7.500.000 cada ampolla. Con el pago del viaje de los diputados se podían haber comprado 25 ampollas.
En Paraguay una ampolla de Irinotecan, droga utilizada para tratar el cáncer de colon o de recto, tiene un precio de G. 970.000 cuando el IPS no lo tiene disponible, y el mismo fármaco en una farmacia de Clorinda, Argentina, cuesta tan solo G. 120.000. Se habrían podido comprar 274 ampollas en Paraguay y 2216 en Argentina.
“El prembolizumab cuesta G. 35 millones cada ampolla y los pacientes usan dos en una sesión que deben realizarse cada 21 días”, denunció un paciente días atrás ante su escasez. Con el monto del viaje se habrían podido comprar siete ampollas.