La estructura liderada por el zar del microtráfico, Armando Javier Rotela, conocida como el Clan Rotela o La Jungla, logró expandirse de las zonas bajas de Asunción y expandir su dominio a otros departamentos, así como obtener su propia logística para el transporte y tráfico de drogas internacional, según los datos que manejan los investigadores de la Policía Nacional.

El informe investigativo realizado en base a las escuchas telefónicas, el grupo delictivo cuenta con miembros que realizan transacciones de cargamentos de drogas en Bolivia, para el ingreso al país de cocaína de alta pureza y su posterior procesamiento del residuo para la reducción y fabricación de crac.

También se maneja la información de que el grupo criminal, fortalecido años atrás desde la penitenciaria Nacional de Tacumbú, realiza su propia producción y acopio marihuana, para su posterior distribución a nivel local y también a países de la región.

Los datos que manejan los investigadores señalan que la estructura del Clan Rotela cuenta con total dominio de la logística narcomenudeo y otros hechos delictivos, como sicariatos y asaltos a mano armadas, en varios barrios de Asunción, como los Bañados Norte y Sur, así como en los barrios: Roberto L. Petit, Obrero, Republicano y parte de Ricardo Brugada.

Además, cuenta con influencia en ciudades de otros departamentos del país, como: Central, Cordillera, Paraguarí y bajo Chaco (ver info).

Allanamientos. Ayer, una importante comitiva policial y fiscal realizó dos allanamientos de viviendas en simultáneos, uno en la ciudad de Fernando de la Mora y otro en Villa Elisa, en busca de dar un duro golpe al brazo logístico del grupo criminal.

Durante los operativos se registró tres detenciones de hombres considerados brazo derecho de Armando Rotela, además de la incautación de varias evidencias.

Los detenidos fueron identificados como Luis Amadeus Monges Medina, alias Toto, Elías Manuel Romero Roa, de 21 años, y Denilson Armando Roa Barrios, de 25 años.

Entre las evidencias incautadas se destacan varias armas de fuego junto con sus cargadores, una importante cantidad de chips de distintas telefonías, aparatos celulares, chapas de vehículos, herramientas, DVRs de circuito cerrado y bolsas con logos de una conocida transportadora de caudales, cuyas series serán analizadas para corroborar de donde corresponden.

“Son brazos logísticos de lo que denominamos La Jungla, derivado de lo que es Rotela”, explicó el comisario Luis López, jefe del Departamento Policial contra el Crimen Organizado, tras culminar los operativos.

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